Trabajando en elloLos leoneses tenemos desde hace tiempo una serie de preguntas que formular al que fuera nuestro Presidente del Gobierno. Hoy hace una semana que vino a León a hablar de su libro España puede salir de la crisis. Y, dado que no queríamos que la escena acabara como aquella celebérrima de Paco Umbral en un plató de televisión, reservamos este humilde espacio para plantearle una serie de cuestiones:
i) ¿Por qué, si cree en el déficit cero, su partido, después de décadas de gobierno, dejó las arcas del Ayuntamiento de León en bancarrota –cerca de treinta mil millones de las antiguas pesetas de deuda a 15 de junio de 2003?
ii) ¿Por qué, si dice ser un hombre de palabra, nos mintió astrosamente con el proyecto fantasma de la Escuela de Pilotos, del cual, como pasó con la estafa de la Biomédica perpetrada por su amigo Juan Morano, nunca supimos nada?
iii) ¿Por qué, si su partido firmó el pacto antitransfuguismo, no reprobó la maniobra política realizada por Amilivia junto a de Francisco, felón por aquel entonces de la UPL, en diciembre de 2004?
iv) ¿Por qué, si tan buen Presidente era, su último Presupuesto General del Estado consignaba para nuestra provincia 2,5 veces menos que el último de Zapatero en la pasada legislatura?
v) ¿Por qué, si es evidente que es un fenómeno real y al respecto existe un amplio consenso en la comunidad científica, niega el cambio climático?
vi) ¿Por qué, si nos dijo ante las cámaras de televisión “créanme, pueden estar seguros de que les estoy diciendo la verdad”, no había ADM en Iraq?
Aunque sin su inefable bigote no sea el mismo que fue, Aznar sigue en plena forma.
El tiempo libre que le resta toda vez efectuadas las 2.000 flexiones diarias de rigor y una vez plasmadas sus reflexiones en libros pretenciosos, imagino que lo aprovecha para, con los pies encima de la mesa, telefonear a su amigo Bush (“How are you, George?”, dirá con acento tejano) y remembrar con añoranza cómo le pasaba la mano por encima del hombro mientras se ubicaba para aquella foto en aquel archipiélago del Atlántico a la vez que nuestro edecán pensaba: Estoy saliendo del rincón de la historia. Aguardamos con impaciencia respuestas.
Publicado en La Crónica de León , 15 de julio de 2009, página 2
i) ¿Por qué, si cree en el déficit cero, su partido, después de décadas de gobierno, dejó las arcas del Ayuntamiento de León en bancarrota –cerca de treinta mil millones de las antiguas pesetas de deuda a 15 de junio de 2003?
ii) ¿Por qué, si dice ser un hombre de palabra, nos mintió astrosamente con el proyecto fantasma de la Escuela de Pilotos, del cual, como pasó con la estafa de la Biomédica perpetrada por su amigo Juan Morano, nunca supimos nada?
iii) ¿Por qué, si su partido firmó el pacto antitransfuguismo, no reprobó la maniobra política realizada por Amilivia junto a de Francisco, felón por aquel entonces de la UPL, en diciembre de 2004?
iv) ¿Por qué, si tan buen Presidente era, su último Presupuesto General del Estado consignaba para nuestra provincia 2,5 veces menos que el último de Zapatero en la pasada legislatura?
v) ¿Por qué, si es evidente que es un fenómeno real y al respecto existe un amplio consenso en la comunidad científica, niega el cambio climático?
vi) ¿Por qué, si nos dijo ante las cámaras de televisión “créanme, pueden estar seguros de que les estoy diciendo la verdad”, no había ADM en Iraq?
Aunque sin su inefable bigote no sea el mismo que fue, Aznar sigue en plena forma.
El tiempo libre que le resta toda vez efectuadas las 2.000 flexiones diarias de rigor y una vez plasmadas sus reflexiones en libros pretenciosos, imagino que lo aprovecha para, con los pies encima de la mesa, telefonear a su amigo Bush (“How are you, George?”, dirá con acento tejano) y remembrar con añoranza cómo le pasaba la mano por encima del hombro mientras se ubicaba para aquella foto en aquel archipiélago del Atlántico a la vez que nuestro edecán pensaba: Estoy saliendo del rincón de la historia. Aguardamos con impaciencia respuestas.
Publicado en La Crónica de León , 15 de julio de 2009, página 2
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